Jake Bates logró un gol de campo de 52 yardas cuando el tiempo expiraba, y los Lions de Detroit superaron cinco intercepciones, un máximo en la carrera de Jared Goff, para remontar y ganar 26-23 contra los Texans de Houston el domingo por la noche.
Los Lions mejoraron a un récord de 8-1 por primera vez desde 1954 con su séptima victoria consecutiva en general y la quinta seguida fuera de casa.
Detroit estaba abajo 23-7 al medio tiempo después de que Goff lanzara tres intercepciones en los primeros dos cuartos, y lanzó dos más en el tercer periodo. Sin embargo, los Lions anotaron 16 puntos consecutivos para empatar el juego con aproximadamente cinco minutos restantes, gracias a un gol de campo de 58 yardas de Bates.
Los Texans (6-4) tuvieron la oportunidad de tomar la delantera con poco menos de dos minutos restantes, pero el intento de 58 yardas de Ka’imi Fairbairn se fue a la izquierda.
Los Lions se convirtieron en el primer equipo en ganar un partido después de lanzar cinco o más intercepciones desde que Atlanta venció a Arizona 23-19 el 18 de noviembre de 2012, cuando Matt Ryan fue interceptado cinco veces.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.
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