Kyrie Irving, uno de los líderes de los Dallas Mavericks, aseguró este jueves que esperaba que hubiera «más ruido» en el TD Garden de Boston, al que regresó entre abucheos como rival para disputar el primer partido de las Finales NBA, acabado con derrota de los texanos por 107-89.

«Es baloncesto al final. Estoy acostumbrado a estar en estos ambientes. Al principio de mi carrera tenía una relación distinta con Boston, ahora estoy aquí como un veterano», dijo Irving en la rueda de prensa posterior al partido del TD Garden.

«Pensé que iba a haber más ruido, pero espero lo mismo en el segundo partido. La energía se tiene que enfocar en el partido», agregó.

Irving no pasó de los doce puntos, con seis de 19 en tiros de campo y cero de cinco en triples.

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«Es el mejor momento del año para jugar. El ambiente va a ser lo que es, pero yo quiero asegurarme de mantener la confianza», afirmó.

Los Celtics destrozaron a los Mavericks en el primer partido de las Finales impulsados por el extraordinario regreso del letón Kristaps Porzingis, quien firmó 20 puntos, seis rebotes y tres tapones saliendo del banquillo.

Jaylen Brown firmó 22 puntos y Jayson Tatum aportó 16, 11 rebotes y 5 asistencias, aunque también perdió 6 balones.

Doncic firmó 30 puntos y 10 rebotes, pero solo dio una asistencia, un dato poco habitual para la estrella eslovena.