La Coalición Sigamos Haciendo Historia amarró la mayoría calificada con 364 curules en la Cámara de Diputados, lo que significa que las bancadas de Morena, PT y Verde podrán reformar la Constitución; y también obtuvo la cifra de 83 senadores, es decir, control pero se quedaron muy cerca, a dos escaños del umbral de mayoría en la Cámara Alta. Tras un largo debate de cinco horas, consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE) aprobaron, con ocho votos en favor y tres en contra, la asignación de legisladores plurinominales conforme a lo proyectado: Morena y aliados tendrán el 72.8% de las curules, y en el Senado 64.84% de los escaños.
La oposición anunció que impugnará la decisión ante la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) –el plazo vence el domingo– para que la semana entrante resuelva, antes de la instalación de la 66 Legislatura e incluso hasta el 1 de septiembre en que inicia la Legislatura. Con la asignación de plurinominales, sumados a los triunfos de mayoría cuya definitividad ya fue declarada, quedó ya conformada la totalidad de la Cámara de Diputados y del Senado. Y aunque horas antes la consejera Claudia Zavala puso en la mesa una interpretación novedosa y constitucional, que hubiera retirado al bloque morenista la mayoría calificada, sólo ella y los consejeros Martin Faz y Jaime Rivera respaldaron esa propuesta alternativa. En la discusión, el bloque oficialista y el opositor amagaron a los consejeros. El representante guinda, Sergio Gutiérrez Luna, amenazó que el cambio de postura de Zavala y Faz los coloca en la hipótesis de juicio político. Guadalupe Acosta Naranjo, representante del Partido de la Revolución Democrática (PRD), advirtió a los consejeros que con su voto tenían dos alternativas: quedar como “Manuel Bartlett o como José Woldenberg”. Sin embargo, los votos no se modificaron. Y aprobaron la distribución de pluris la consejera presidenta Guadalupe Taddei y con ella los consejeros Norma De la Cruz, Ucc Kib Espadas, Arturo Castillo, Carla Humphrey, Rita Bell, Dania Ravel y Arturo Montaño. En contra, votaron los consejeros Jaime Rivera, Claudia Zavala y Martin Faz.
¿Cómo quedó la oposición en el Congreso?
¿Cómo quedó el reparto de diputados por partidos? En la primera parte de la sesión del INE, únicamente se avaló la asignación de diputados de representación proporcional y más tarde se aprobó el acuerdo de distribución de senadores pluris. Dicho acuerdo dio a Morena y aliados 83 escaños y se quedaron muy cerca, a dos posiciones, del umbral de mayoría calificada de 85 legisladores, con un total, por ahora, de 64.84% de los escaños. Con esa conformación estará integrado el Senado para el periodo de 2024 a 2030, lo que corresponde a las Legislaturas 66 y 67, salvo que en la instalación las bancadas de la Cuarta Transformación sumen a legisladores que ganaron su escaño postulados por otra fuerza. En tanto, la conformación de la 66 Legislatura de la Cámara de Diputados para el trienio 2024-2027 quedó con Morena con 161 diputados de mayoría y 75 de representación proporcional. Sin embargo el perredista Ángel Ávila Romero evidenció que en los hechos Morena tendrá muchos más diputados federales que esos, pues no sólo hubo “cachirules” entre los candidatos de mayoría, sino que al menos 14 afiliados morenistas llegarán en las listas pluris del Partido del Trabajo (PT) y Verde (PVEM). De concretarse eso daría una bancada de 250 diputados federales de Morena. “En las listas del PT pluris hay 14 integrantes de Morena y dos del PVEM. Donde Morena iba a ganar le dieron candidaturas al PT pero se las regresó en pluris eso se llama fraude a la ley”, alertó al evidenciar el proceso “quirúrgico”. Los aliados morenistas en la Coalición Sigamos Haciendo Historia (SHH) quedaron de la siguiente manera: el PT tendrá 38 diputados de mayoría –donde fue coaligado, pues no ganó ni un distrito solo- y 13 pluris, para una bancada de 51 curules y el PVEM 57 de mayoría –igualmente todos coaligados- y 20 pluris, en total 77 diputados, con lo que será segunda fuerza en esa Cámara. En el Senado casi se logró lo que en campaña fue llamado «El Plan C», como fue promocionada la idea de dar mayoría a Morena por el presidente Andrés Manuel López Obrador y así lograr, por sí mismos aprobar reformas constitucionales y no tener un “bloque de contención” opositora que las frenara, pues con 83 senadores le faltarán dos senadores para tener la mayoría calificada de 85 escaños. Morena alcanzó 46 senadores de mayoría y primera minoría, a los que sumó 14 plurinominales, para una bancada de 60. Su aliado el PT con siete senadores de mayoría y dos pluris, tendría grupo parlamentario de 9 y el PVEM, con 11 triunfos de mayoría y 3 pluris, tendrá un grupo de 14. A los tres partidos de oposición en su conjunto: Acción Nacional (PAN), Revolucionario Institucional (PRI) y Movimiento Ciudadano (MC) les corresponderían 27.2% del órgano legislativo. Al PAN le correspondieron 40 diputaciones plurinominales y dado que el 2 de junio ganó 32 distritos, tendrá un grupo parlamentario de 72 diputados. Al PRI se sumaron 9 triunfos de mayoría y un total de 26 diputados pluris, para bancada de 35 diputados. A Movimiento Ciudadano, único partido que no fue en Coalición en la pasada elección, se le asignaron 26 diputados pluris a su único triunfo distrital, con lo que su bancada sea de 27 legisladores.
Así dieron el debate
En la discusión, los consejeros que votaron a favor pusieron énfasis en que no pueden interpretar la Constitución de manera distinta a lo que se ha hecho en el pasado: el 8% de sobrerrepresentación se aplica sobre partidos, no sobre coaliciones, como pidieron al INE académicos y opositores para limitar la presencia de La Cuarta Transformación en la Cámara de Diputados. Es así que Morena y aliados tendrán la mayoría calificada y el criterio fue defendido “pedirle al INE hoy, que aplique esta fórmula de otra manera es impensable, este Consejo General no puede apartarse de la Constitución”, advirtió la consejera presidenta Guadalupe Taddei. El límite del 8% “aplica a los partidos en lo individual. Es inaceptable colocar al INE en una falsa disyuntiva, la Constitución es contundente y precisa. No hay dilema. Las reglas constitucionales son muy claras” agregó. “El INE no construye fracciones parlamentarias. Tampoco tenemos dudas de cómo se aplica la Constitución. No existe un dilema. Nuestro actuar está más allá de coyunturas electorales (…) el INE no quita ni regala diputaciones ni senadurías. La única que puede hacerlo es la ciudadanía con su voto”. Incluso, el consejero presidente de la Comisión de Prerrogativas, Ucc Kib Espadas expresó que aún no gustándole la sobrerrepresentación aprobada, la fórmula la marca la Constitución. “De 1997 a la fecha se han dado cientos, sino miles de lecturas iguales a este mandato constitucional (…) nadie, nadie jamás ha pretendido que donde la Constitución dice ´ocho por ciento del total de la Cámara´ se debe leer ´ ocho por ciento de la votación de cada partido´… Los participantes de esas negociaciones están vivos, la pretensión jamás fue ni jamás se interpretó así”, expuso. También a favor de la aplicación tradicional, pero con crítica a una y otras posturas, la de la rigidez constitucional y la flexibilidad para interpretar y aplicar otra fórmula, el consejero Arturo Castillo evidenció que quienes así lo expresan pensaban al revés. Quienes en 1996 aprobaron por unanimidad el modelo hoy, exigen una nueva interpretación en aras de una interpretación más justa. Y por otro lado, con excepción del PRD, quienes antes cuestionaron el modelo y durante los últimos años han sostenido que la justicia debe primar sobre la ley, hoy piden una interpretación más estricta. Estamos entre la justicia y la ley”. Para el consejero “se exige que se trate a las coaliciones como si se tratar de parridos eso implicaría desconocer la voluntad del legislador y dejar sin efecto porciones normativas”. La consejera Dania Ravel expuso que todos recibieron presiones de ambos bandos y aseveró que el criterio aplicado para la asignación de plurinominales es el mismo desde 2015. “No deja de ser llamativo las exigencias de personas que fueron consejeras electorales, que estuvieron aquí sentados y que no hicieron una modificación, una interpretación diversa de la manera como nosotros estábamos aplicando esta fórmula”, dijo de un conjunto de exconsejeros que siempre votaron por aplicar la fórmula avalada hoy. “No dijeron en ningún momento, que deberíamos de entender que donde dice partido político se debe de interpretar coalición y mucho menos lo votaron así en este Consejo General”, señaló.
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