El presidente de la FIFA Gianni Infantino se reunió con fiscales especiales el martes en Suiza como parte de una investigación criminal sobre reuniones no reveladas que sostuvo con el fiscal general como parte de una investigación más amplia contra oficiales del fútbol.
En 2020 un exfiscal especial —que más tarde fue removido del caso por una corte federal de Suiza— recomendó el proceso penal contra Infantino por posible incitación a cometer abuso de la oficina pública y violación al secretismo oficial.
El caso que posiblemente implica a Infantino avanza en su país natal semanas después de que terminó la Copa Mundial en Qatar y dos meses antes de que sea reelegido sin rival por los miembros integrantes de la FIFA.
El fiscal especial Hans Maurer confirmó por correo electrónico a The Associated Press que “se llevó a cabo un careo durante el procedimiento” que condujo el mismo y el fiscal Ulrich Weder.
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“Sin embargo, no comento en el tiempo, alcance y propósito de la audiencia”, escribió Maurer.
Los dos fiscales fueron electos por el parlamento suizo en diciembre 2021 para continuar la investigación relacionada a dos reuniones no documentadas que se llevaron a cabo en 2016 y 2017 y que involucran a Infantino y el fiscal general Michael Lauber.
Las reuniones comenzaron poco después de que Infantino fue electo presidente de la FIFA como consecuencia de las investigaciones en Estados Unidos y Suiza de supuesta corrupción en el fútbol internacional y que obligó a que renunciara su predecesor Sepp Blatter.
Después de que la prensa dio a conocer las reuniones en 2018, Lauber e Infantino aseguraron que se trataron de reuniones rutinarias, pero que no recordaban los detalles.
Lauber fue destituido después de que encontraron que engañó y obstruyó una oficina federal que supervisa a los fiscales, y que en ese momento intentaba encontrar más información sobre las reuniones.
La FIFA declinó comentaron el martes sobre el cuestionamiento a su presidente.
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