En una Serie Mundial poblada de nombres rutilantes —Ohtani, Guerrero Jr., Betts—, hay un hombre que lanza desde la sombra con la serenidad de quien no busca aplausos. Chris Bassitt, 36 años, se convirtió en el sostén silencioso de los Blue Jays de Toronto, el veterano que devuelve el orden cuando todo tiembla.
En septiembre, una lesión lumbar y fatiga en el antebrazo derecho lo habían enviado a la lista de lesionados. El parte médico recomendaba reposo; Bassitt pidió lo contrario: seguir lanzando. Un mes después, contra los pronósticos, reapareció en la postemporada como relevista. Lo que comenzó como un recurso de emergencia se transformó en una pieza clave del bullpen canadiense.
Su desempeño roza la perfección: 0.00 de efectividad en 6.2 entradas, un solo hit permitido, ocho ponches y ningún boleto. En la Serie Mundial suma cuatro innings perfectos frente a la ofensiva más poderosa del torneo, con un WHIP de 0.30, casi irreal en octubre.
El secreto
En el Juego 4, entró en la séptima entrada con el marcador ajustado y los Dodgers al acecho. Retiró a Kiké Hernández, Alex Call y Shohei Ohtani en orden: rodado, ponche, rodado. Tres outs limpios, tres suspiros contenidos. La noche anterior, en el maratónico Juego 3 de 18 entradas, había lanzado otro episodio perfecto. Fue la primera vez en su carrera que subía al montículo en días consecutivos, algo impensable para un abridor veterano.
Su secreto está en la variedad: siete lanzamientos distintos, desde el sinker pesado y el cutter filoso hasta una curva lenta, un slider, un cambio y un splitter ocasional. Esa orquesta de velocidades —entre 72 y 94 mph— convierte cada turno en un acertijo. No depende de la fuerza, sino del cálculo.
Bassitt conoce la fragilidad y la paciencia. En 2016, una cirugía Tommy John lo obligó a un año de recuperación; desde entonces, aprendió a lanzar con la cabeza tanto como con el brazo. Su regreso en esta Serie Mundial es la culminación de esa madurez.
En un béisbol de luces y gestos, Bassitt representa la vieja escuela de precisión, compostura y eficacia.


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